Los maximos expertos en UUVs (Unmanned Underwater Vehicles) de la U.S. ONR (United States Office of Naval Research) están aumentando sus esfuerzos para conseguir un sistema de propulsión para la nueva generación de UUVs de larga autonomía que están actualmente en desarrollo.
A tal efecto, la ONR ha firmado recientemente sendos contratos de investigación por un valor conjunto de 40 millones de dólares, adjudicados a Fuelcell Energy Inc. (Danbury, Connecticut) y Sierra Lobo Inc. (Fremont, Ohio).
Ambos contratos están acogidos al Programa LDUUV (Large Displacement Unmanned Undersea Vehicle) que persigue el desarrollo de UUVs de gran autonomía capaces de operar cerca de la costa en misiones de vigilancia persistente; a tal efecto, necesita desarrollar sistemas energéticos que no dependan del aire, al objeto de extender la autonomía de los UUVs durante varios meses de operación.
Por lo que respecta a Sierra Lobo, el contrato exige de esta compañía el desarrollo de un sistema de energía para vehículos submarinos basado en celulas de combustible criogénico. Sierra Lobo está especializada en tecnologías de almacenamiento de reactantes criogénicos para propulsión de UUVs. Más concretamente, en sistemas avanzados de almacenamiento para hidrógeno líquido y oxígeno líquido.
Por lo que respecta a Fuelcell Energy, el contrato le exige el desarrollo de baterías híbridas SOFC (Solid Oxide Fuel Cell) para el Programa LDUUV. La tecnología SOFC permite la producción directa de energía eléctrica mediante la oxidación de un combustible, sin que exista una reacción de combustion convencional.
Sierra Lobo y Fuelcell Energy se unen de esta manera a Hamilton Sundstrand Corp. Sea Systems segment (Windsor Locks, Connecticut), General Atomics (San Diego, California), Lynntech Inc. (College Station, Texas) y NexTech Materials Ltd. (Lewis Center, Ohio), que tambien están involucradas en este proyecto de la ONR para desarrollar sistemas avanzados de propulsión para futuros UUVs de gran autonomía. El contrato de la ONR con Hamilton Sundstrand asciende a 18 millones de dólares. El contrato con General Atomics oscila entre un mínimo de 25.000 dólares y un máximo de 20 millones. Los contratos con Lynntech y NexTech, ascienden ambos a 18 millones de dólares.